La veeduría Jhon Jairo Arcila por la defensa del patrimonio ambiental y cultural de Jericó estableció denuncia ante la Superintendencia de Industria y Comercio por la publicidad engañosa que según este colectivo viene presentando la multinacional minera de manera reiterada con relación a su proyecto de explotación denominado Quebradona.
En un comunicado emitido a la opinión pública, se deja claro que las múltiples afirmaciones entregadas por la minera en los reportajes pagados a los medios nacionales no se corresponden con las presentaciones suministradas en el Estudio de Impacto Ambiental y con la realidad. “Son dos versiones distintas respecto a las afectaciones del agua, del paisaje, de los escombros mineros que van a permanecer cerca del río Cauca de manera indefinida. Todos estos aspectos de graves impactos ambientales y sociales, que están presentes parcialmente en el Estudio de Impacto Ambiental, en las comunicaciones al público no se dicen”. Expresó Fernando Jaramillo, integrante de la Mesa Ambiental de Jericó.
Para los líderes ambientales, la multinacional busca lograr sus objetivos a base de la insistencia y repetición de esas discordancias, de ahí que esperen que la opinión de quienes llegarían a ser afectados y perjudicados con la eventual realización del proyecto, no se oponga a sus intereses de desarrollarlo y que además un amplio público no relacionado con la región llegue al convencimiento de que esa realización sería de gran beneficio para el país y para la región y que, con ello, la ciudadanía perciba que el proyecto minero cuenta con licencia social, situación que dista de la realidad jurídica y social de Colombia. Esta estrategia sería desarrollada con el ánimo de establecer presión contra la ciudadanía y las organizaciones encargadas de dar vía libre al proyecto se precisa en el documento.
La organización destacó algunas afirmaciones engañosas de la multinacional:
“Este [proyecto] tiene impactos mínimos en cuanto a calidad del aire y ruido porque toda la actividad es dentro de la montaña”. Todo el procesamiento de esa roca (17.000 toneladas diarias) hasta sacarle los metales y despacharlos, lo harían en la planta en la superficie de la vereda Cauca.
“El parque biodinámico de bosque seco tropical y de alta montaña… multiplicará por seis la extensión actual de este ecosistema en la región” y que “esto promovería la conservación de fuentes hídricas”. El Estudio de Impacto Ambiental, reconoce que habría pérdida de aguas superficiales por infiltración.
De esa forma el colectivo ambiental pidió las sanciones a las que haya lugar por lo que consideran es una sistemática campaña que engaña y pretende presionar a la población, al tiempo que destacaron su compromiso por continuar defendiendo el patrimonio ambiental y campesino de la región.
Lea el comunicado completo aquí:
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