Una seria denuncia presentó recientemente a través de las redes sociales el concejal Sebastián Galeano. Según sus afirmaciones, la alcaldía y el comité de cafeteros habían acordado la ejecución de 200 metros de placa huella en la vereda El Líbano, pero estas decisiones fueron revocadas por la administración actual, dirigida por el alcalde Germán Vélez, trasladando la obra hacia una vía privada que al parecer beneficiaría directamente a la familia del mandatario.
“Los habitantes de la vereda El Líbano llevamos 8 años esperando la ejecución de una placa huella para atender los puntos críticos de la comunidad y cuando por fin tenemos la posibilidad de que se ejecuten 200 metros de placa huella, los cuales fueron financiados por la administración municipal y el Comité de Cafeteros, el señor alcalde se lo lleva para una ‘ramal’ privado que únicamente beneficia a su casa y a la de su familia, primando el bien propio ante el bien común”, afirmó el Galeano.
El concejal mostró su indignación ante lo que calificó como una decisión injusta y exigió que se brinden todas las explicaciones pertinentes sobre esta situación. “Yo quiero que el alcalde le explique a la comunidad y al pueblo por qué se toma esta determinación. ¿De esta manera es que se va a gobernar?, realmente esto nos indigna y merece una explicación”.
Si bien el alcalde Germán Vélez no respondió directamente a la denuncia, el secretario de Planeación e Infraestructura Física, Juan Guillermo Correa Mejía, salió al paso de la polémica. El ingeniero explicó que las obras en cuestión fueron concertadas en una reunión con la comunidad, justificando el traslado hacia ese punto debido a la alta afluencia de personas por ese sector, lo que da a entender que no fue una decisión impuesta.
“Quiero manifestarles que los rieles que una vez se prometieron para esta comunidad se quedaron en la vereda El Líbano, no nos lo llevamos, ni fue la orden de llevarlos a otra vereda. Los rieles fueron priorizados por la misma comunidad en socialización con el señor alcalde y el equipo técnico de la secretaría de Planeación, ya que en este punto se encuentra gran aglomeración de la comunidad de El Líbano, se encuentra un caserío cercano a la escuela y a la caseta comunal. En esta socialización nos acompañó el presidente de la Junta de Acción Comunal”, explicó el ingeniero.
El funcionario también señaló que se continuarán adelantando gestiones para la intervención de otros puntos rurales en Andes, y desestimó las denuncias del concejal Galeano como meros intereses políticos. “Hoy El Líbano cuenta no solo con 100 metros lineales de placa huella, sino que alcanzamos a construir 140 metros lineales. Quiero invitar a la cordialidad a toda la comunidad andina, no permitamos que los rumores o los aspectos políticos por cualquier motivo o interés personal nos lleven a desconfiar del trabajo que hoy se está haciendo prudentemente con todas las comunidades de Andes. Nuestro mayor interés es realizar las obras en los lugares donde mayor impacto tengamos en las comunidades, especialmente en las zonas educativas, es decir, que vamos a llegar a beneficiar a los niños del municipio de Andes”. Esbozó.
De acuerdo con Correa Mejía, incluso la misma comunidad de El Líbano se comprometió a realizar las inversiones con mano de obra que hacen parte del cierre financiero del proyecto.
Sin embargo, otras voces de la ciudadanía afirman que muchos de ellos no fueron tenidos en cuenta en la decisión y que, de hecho, la vía privada que supuestamente pasará a ser pública, tiene grandes pendientes o inclinaciones que condicionan la movilidad y amenazan riesgo para quienes transiten por allí.
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