La Procuraduría General de la Nación formuló cargos a dos patrulleros de la Policía Nacional adscritos en el 2021 a la estación del municipio de Andes por presunto uso desproporcionado de la fuerza en actividades de patrullaje, registro y control.
El ente de control cuestionó la forma en que los miembros de la institución policial habrían actuado al requisar, esposar y conducir a un ciudadano de 30 años en estado de embriaguez al comando, luego de encontrarle una navaja que, al parecer, se negó a entregar, pues durante el forcejeo lo habrían tirado al piso para agredirlo.
El informe forense emitido por un médico legal del Hospital San Rafael concluyó que, además de las diferentes lesiones en el cuerpo, el afectado, a quien los uniformados le impusieron dos comparendos, sufrió una herida en el rostro que le generó una incapacidad de 20 días, y le dejó una cicatriz permanente en el ojo derecho.
Para el Ministerio Público, los patrulleros, “estaban llamados a cumplir con las normas que regulan cada procedimiento (…) en lo referido al uso de la fuerza” y, a pesar de que habrían tenido la posibilidad de haber actuado de manera diferente, habrían obrado contrario a los mandatos legales.
La conducta de los disciplinables fue calificada provisionalmente como constitutiva de falta gravísima a título de culpa grave.
Los sujetos procesales podrán presentar descargos y/o solicitar o aportar las pruebas que consideren pertinentes para su defensa. El expediente se remitirá a la Procuraduría Provincial de Juzgamiento de Valle de Aburrá, para que asuma el conocimiento de la etapa de juzgamiento respecto al cargo formulado.
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