Un joven de 24 años fallecido, tres viviendas arrasadas, siete puentes peatonales sobre ríos afectados y una significativa pérdida de reses y otros animales es el balance que dejan las avenidas torrenciales y deslizamientos que se registraron en las últimas horas en la vereda La Aná a 10 kilómetros del casco urbano del municipio de Urrao.
Según informó el alcalde, Nilson Barrera, desde que se conoció la emergencia, fueron desplazados varios frentes de atención. “Tenemos una emergencia en la vereda La Aná, allí nos encontramos con una tragedia por las intensas lluvias, donde fallece una persona muy joven. Estamos mirando lo que requiere la comunidad para presentar informe completo al Dagran de toda la situación que estamos viviendo aquí en La Aná, Piedras Blancas”.
Lamentablemente, también se vieron afectados cultivos y se registró el represamiento de un afluente, por lo que fue necesario decretar alerta naranja, lo que implicó el desalojo de varias familias que podrían verse afectadas ante una creciente súbita. “A través del Dagran estamos a la espera de que nos asesoren para saber cuál es el manejo que le debemos dar a este represamiento. Estamos en coordinación con el presidente de la junta y el Consejo Municipal de Gestión del Riesgo atentos a cualquier situación adicional. Tenemos afectaciones en todas las vías secundarias, en las vías Urrao – Caicedo, Urrao – Betulia, Urrao – Altamira – Cangrejos. También tenemos afectaciones en vías terciarias las cuales están siendo atendidas por la maquinaria del municipio”. Expresó el mandatario.
Alexander Seguro, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda, expreso con evidente preocupación la situación generada por las lluvias, pues a la evacuación de decenas de familias, se suma la pérdida de sus cultivos, y por ende, de la capacidad de generar recursos económicos. “Se vinieron varios deslizamientos y en este momento estamos incomunicados, tenemos tres viviendas con pérdida total, afectación a aproximadamente siete puentes peatonales de los que se benefician varias familias y por donde los niños pasan para las escuelas. Tenemos animales perdidos y cultivos en pérdida total”.
Para hoy se espera acompañamiento por parte de personal del departamento de gestión del riesgo de Antioquia -DAGRAN- y de la Gobernación de Antioquia, al tiempo que se hacen monitoreos sobre el territorio con un dron, para determinar el nivel de riesgo de los embates climáticos.
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