Una denuncia publicada en la red social Facebook por el concejal Alejandro Garzón este domingo 2 de agosto, en la que indicaba que la respuesta de los uniformados de la policía nacional ante las constantes llamadas por celebraciones en diferentes barrios de Andes se vio diezmada esa madrugada por la falta de combustible para los vehículos de la fuerza pública, generó una gran controversia política en la localidad. En la transmisión que se dio hacia las 12:20 a.m. el concejal estableció: “Decirle a toda la comunidad andina que mediante llamadas que hemos recibido, nos tomamos el atrevimiento de visitar la estación de policía de Andes y mirar qué pasaba, saber por qué no se ha estado visitando los lugares en los que hay denuncias de rumbas y, nos encontramos con que los vehículos están parqueados porque no hay combustible para ellos en el municipio de Andes”.
Sin embargo, el capitán Fabián Portela se pronunció en compañía del alcalde Carlos Alberto Osorio, respecto a este caso, desmintiendo esas afirmaciones. “Queremos desvirtuar esto, haciendo énfasis en que ningún momento la policía ha puesto este tipo de quejas, ni ha manifestado el no atender los casos porque no tengamos combustible. Si bien es cierto que hay algunas situaciones de orden administrativo que se salen de la competencia de la administración municipal y de este comando, las mismas fueron solucionadas para atender el total de los casos”. Pese a esto, Conexión Sur conoció varias publicaciones y denuncias de habitantes que afirman que lo manifestado por el concejal fue precisamente la respuesta que recibieron cuando se pusieron en contacto con la estación para dar a conocer situaciones de desorden en algunos barrios.
El mandatario manifestó por su parte que este tipo de pronunciamientos afectan la imagen de las instituciones e hizo un llamado directo al concejal. “Le solicito a usted que es servidor público, que ostenta la calidad de concejal del municipio, primero tenga las pruebas antes de hacer esos pronunciamientos en contra de la institucionalidad, porque se genera una mala imagen y eso no lo vamos a permitir desde esta administración, por eso insisto en que tenemos que trabajar unidos”.
Alejandro Garzón se pronunció nuevamente tras conocer las versiones entregadas por el alcalde y el comandante de estación y ratificó lo manifestado en una primera ocasión y aclaró que antes de dar a conocer públicamente la situación, le informó al alcalde lo que estaba sucediendo. “Quiero ratificar lo dicho en el video anterior, hoy con más pruebas, con más fundamentos. Pedirle a la administración municipal que esto no vuelva a suceder, porque se puso en riesgo la seguridad de nuestro municipio puesto que la Policía Nacional no tenía los elementos para tener la capacidad de respuesta”.
Y es que en este tiempo de aislamiento preventivo los casos a atender por los uniformados se han desplazado hacia residencias y zonas rurales, informó Portela. “Tengamos paciencia. Un fin de semana se atienden entre 200 y 250 llamadas donde nos informan de fiestas; se está atendiendo un total de 70 a 80 peleas, entonces no es fácil, esto para que evitemos salir a hacer señalamientos y atacar a la institucionalidad”.
Los tres funcionarios coincidieron en la necesidad de cumplir estrictamente con las medidas establecidas por las autoridades para evitar el crecimiento de casos y de paso contribuir a la seguridad en el municipio.
Las noticias del Suroeste antioqueño están en Conexión Sur.