Caficultores de los cinco municipios del radio de acción de la Cooperativa de Caficultores de Andes, en el suroeste antioqueño, enviaron una carta abierta a las principales autoridades del país, incluyendo al Ministerio de Hacienda, la Federación Nacional de Cafeteros (FNC) y la Superintendencia de la Economía Solidaria, para solicitar una intervención inmediata frente a la potencial pérdida de sus fincas ante los procesos de cobro que la entidad de economía solidaria (en liquidación forzosa administrativa) debe activar ante la demora que ha tomado su reactivación, propósito que por estas fechas cumple cinco años.
En la misiva, fechada el 13 de octubre de 2024, los productores destacan el colapso financiero que afecta a más de 4.000 familias en municipios como Andes, Betania, Ciudad Bolívar, Hispania y Jardín.
Los puntos críticos de la carta:
Acumulación de deudas y embargos. Los productores subrayan la presión económica insostenible causada por la acumulación de deudas, embargos y procesos judiciales que han sumido a los caficultores en una crisis que se agrava cada día. A pesar de una ligera recuperación en el precio del café, los costos de producción y la falta de acceso a nuevos créditos han hecho imposible cumplir con las obligaciones financieras en el corto plazo.
Dificultades climáticas y productivas. A lo largo de los últimos años, la región ha enfrentado fenómenos climáticos extremos, desde intensos periodos de invierno hasta sequías prolongadas, que han impactado gravemente la producción cafetera. Esto, sumado a la falta de mano de obra y la interrupción en la garantía de compra del grano, ha reducido considerablemente la capacidad económica de los caficultores.
Llamado a la negociación de la deuda. Los firmantes, caficultores de todos los municipios del radio de acción de COOPERAN, hicieron un llamado a las instituciones financieras y gremiales para establecer una negociación que les permita un plazo de al menos 15 años para pagar sus deudas. Consideran que este es el tiempo necesario para recuperar la producción y honrar sus compromisos sin caer en una quiebra masiva que afectaría a toda la región.
Críticas a la gestión del riesgo. En la carta, los caficultores critican la falta de gestión de riesgo por parte de la Federación Nacional de Cafeteros -F.N.C.- con relación a la promoción de ventas a futuro, un esquema que, según ellos, no ha funcionado en beneficio de los pequeños productores, por lo que solicitan la revisión y ajuste de estas estrategias para evitar que las malas decisiones de política gremial sigan empeorando la situación.
Finalmente, los caficultores afirman que si bien la cosecha cafetera de este 2024 es próspera en calidad y cantidad, no debe desestimarse una potencial y próxima crisis ante la amenaza de pérdida de las unidades productivas de centenares de familias; pues cada día que pasa sin un acuerdo, aseguran, se profundiza el pánico y la incertidumbre en el sector, poniendo en riesgo la continuidad de la actividad cafetera en una de las regiones más representativas del país.
En conclusión, los caficultores esperan que el Gobierno nacional y las instituciones relacionadas actúen con celeridad en la reactivación, suspendiendo además los embargos y los procesos judiciales, pues sienten que hoy está bajo amenaza el capital productivo de la región. Solo con un diálogo abierto y la cooperación de todos los actores involucrados, afirman, será posible superar la peor crisis que ha enfrentado la caficultura en esta zona en los últimos años; cinco, para ser exactos.
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